La Nostalgia está de Moda
Fecha de Publicación:
La Tabla de Lavar
Desde las redes surgen objetos que aparecen en mi mente y formaron parte de mi niñez, entre ellos, la tabla de lavar
La Tabla de Lavar

Con el tema de las nostalgias y añoranzas que, afloraron por doquier, en redes y distintos espacios de internet, aparecen en mi mente objetos que formaron parte de mi niñez, entre ellos, la tabla de lavar.  Fue inventada como herramienta doméstica para lavar ropa a mano.

Consiste en una tabla de madera en cuya superficie hay una serie de relieves ondulados para frotar la ropa enjabonada. Si de recuerdos se trata, el ruido provocado por la fricción de la ropa mojada contra la madera, en forma pareja y continua, me porta a la familia vecina de mi niñez. La medianera de mi casa familiar, daba al lavadero de la casa de al lado y cada vez que escuchaba ese ruido tan singular, que no era otra cosa que Elvira en su quehacer cotidiano, se despertaba en mí el deseo imperioso de ir a esa casa llena de magia y rosales, que con el tiempo fue mi casa y familia del corazón.

Reflexiono acerca de las distintas formas de lavar ropa, tal vez piensen que es un tema menor. Así sería, si yo no fuese mujer y en mi memoria inmediata no estuviesen las mujeres que gastaron sus nudillos en esa tarea. Entre ellas mi abuela española, que llegó a Buenos Aires desde la región de Lugo, de polizón en el vapor “Sierra Ventana” y que tuvo como actividad laboral la de ser lavandera tanto en Buenos Aires como en Tandil. Lavar ropa de otros (sean de la familia o no) parece haber sido el estigma de las mujeres de todos los tiempos hasta que nació el lavarropas, y si de remembranzas se trata aparece la imagen de mi padre (pionero en la prestación de servicios) que con sus ahorros compró tres lavarropas nuevos y se dedicó a alquilar los mismos durante unas horas, yendo de casa en casa, para dejar la “maravilla” que ayudaba a la pesada tarea del hogar e incluso tenía rodillos estrujadores por donde se escurría la ropa sin necesidad de retorcerla a mano para quitar el agua.

Llegada en Barco de la Abuela Consuelo

Los recuerdos nutren la existencia, pero el progreso nos habla de mejores condiciones de vida y es por eso que la tabla de lavar no me llena de nostalgia. Lavar la ropa a mano (aún se hace hoy, en lugares sin electricidad) es un trabajo que requiere esfuerzo físico y tiempo. En todo caso, es mejor lavar los pensamientos poniéndose por un instante en los zapatos o zapatillas del otro/otra u otre para liberarlos de yugos que encadenan el tiempo. Sí, el tiempo, ese espacio valioso que habla de libertad para hacer otras cosas (ociosas o no)  que van más allá de las tareas hogareñas.

Carlos Amoretti – Puertas del Plata – Uruguay – 1937 – 2010

Temas
Comentarios
- Central -
Néstor: ¡Presente!

Néstor: ¡Presente!

Su muerte sorpresiva paralizó al país. Con el correr de las horas, una multitud se autoconvocó al foro público que los argentinos eligieron desde el nacimiento del país para los grandes acontecimientos: la Plaza de Mayo.
Al Pie de la Letra
Racimos de Pétalos

Racimos de Pétalos

Las plantas y/o árboles que se niegan a morir así porque sí y en el vilipendio del castigo provocado por el que las necesita y reniega de las mismas, la tierra y su hermana naturaleza, descreen de dioses y se consuelan en un reacomodamiento casi inexplicable.
Ya fué
Pumper Nic el Fast Foods Argento

Pumper Nic el Fast Foods Argento

Los “Pamper” como comenzamos a llamarlos los argentinos crecieron en popularidad rápidamente y sus locales brotaron en las principales ciudades, llegando a contarse entre sesenta y setenta mediante el sistema de franquicias.
Graffitis
Clinton en Argentina

Clinton en Argentina

Mientras Clinton decía: “Debemos continuar con nuestra estrategia de libre comercio en toda América (...)”, partidos políticos y organizaciones populares convocaban a marchas y actos repudiando su presencia.
Cancionero
Sobre la Hora (Alma de Güin)

Sobre la Hora (Alma de Güin)

Luis Alberto “Beto” Asurey anda cantando, diciendo sus textos con una música que tiene que ver con Buenos Aires. La cosa urbana, los barrios que quizá su texto más conocido sea el de “Valerosos Corazones Compañeros”.
Columnistas
Más Artículos