Bañada por el río Areco, de ahí su nombre; cercana a Carmen de Areco, mojada por el mismo río, distantes ambas ciudades en 39 km por Ruta Provincial 31, o con caminos en mejores condiciones, por Ruta Provincial 41 y luego por Ruta Nacional 7, en 64 km.
San Antonio de Areco: Gauchos y Alfajores
San Antonio de Areco es una ciudad ubicada a 113 km al norte de la Capital Federal; se accede a ella por Ruta Nacional n° 8, hasta el km 110, luego por Ruta Provincial 41, por 3 km.
En caso de no contar con auto, se puede llegar con el bus Chevallier, partiendo desde la Terminal de Retiro, en un confortable viaje de sólo dos horas; hay varios servicios diarios.
Río Areco
Bañada por el río Areco, de ahí su nombre; cercana a Carmen de Areco, mojada por el mismo río, distantes ambas ciudades en 39 km por Ruta Provincial 31, o con caminos en mejores condiciones, por Ruta Provincial 41 y luego por Ruta Nacional 7, en 64 km.
San Antonio de Areco fue fundada en 1730, es decir, una de las poblaciones más antigüas de la provincia, y declarada “Capital Nacional de la Tradición” en 2015, mediante la Ley n° 27.105.
Cuenta con 27.671 habitantes, según el Censo 2022, y sus primitivos pobladores fueron los pueblos nativos querandíes.
Si queremos pasar un día de excursión distendida, ó un par de días para conocer un poco más, de nuestras tradiciones gauchescas, en un marco de una ciudad cordial y hospitalaria, ¡éste es el lugar ideal!
Plazas, mucho verde, casas bajas, muchas de ellas antigüas, y muuuy antigüas, veredas amplias y tranquilas, la ribera del río Areco, y todos los atractivos que más adelante, pasaremos a contar.
Para buscar información, concurrir a la Dirección de Turismo, en Zerboni y Arellano, te darán todos los datos útiles, con buena predisposición para ayudar al visitante.
Cuenta con varios museos de exposición campestre, nombraremos sólo a tres que hemos visitado.
Museo Gauchesco Ricardo Güiraldes, y Parque Criollo, en el camino Ricardo Güiraldes sin número; refleja la vida y las costumbres del gaucho, y la vida y obra de Ricardo Güiraldes, autor de Don Segundo Sombra; fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1999.
Museo Las Lilas de Areco, en Moreno 279; colección de originales de Florencio Molina Campos; un emocionante audiovisual con esculturas basadas en los dibujos de Molina Campos, recreando las andanzas de Tiléforo Areco, en la voz del gran Luis Landriscina; completa el museo, dibujos y acuarelas de Jorge Daniel Campos, mostrando escenas de la vida de campo y témperas de Luis J. Medrano, que completaron los almanaques de Alpargatas. ¡Verdaderamente, imperdible!
Y La Recova de Gaspa, en Segundo Sombra y Zapiola, es un museo y atelier del maestro Miguel Angel Gasparini, atendido por él mismo; sus obras, su conocimiento, y sus historias del lugar.
La gastronomía se hace presente, con muy buena calidad, precios razonables y accesibles, y con la esmerada atención de los arequeros, siempre dispuestos – con una sonrisa – a asistir al turista.
Y si de alojamiento se trata, hay una amplia y diversa oferta de hotelería, para todos los gustos y todos los bolsillos: desde los modestos y económicos, hasta los sofisticados, para atender al turismo extranjero.
Paseando por las calles de San Antonio de Areco, distendidos y disfrutando de su serenidad, su arbolado, los cantos de las aves, nos encontramos con todo tipo de gente: del interior del país, reconocidos por sus tonadas, y del exterior también, dado que escuchamos varios idiomas: portugués, italiano; además, vimos gente de ojos rasgados, en solitario, y en grupos, con un coordinador o guía al frente del contingente.
Volvamos a la gastronomía, nuestros elegidos: Almacén de Ramos Generales, tipo bodegón antigüo, parrilla (¡de lo mejor!) y variedad de comidas, en Zapiola 143.
Restaurante del Hotel y Spa San Carlos, en Zerboni y Zapiola, lugar refinado, comida internacional, atención esmerada.
¡El Tokyo, en Segundo Sombra y Arellano, restaurante decorado a la antigua, pintoresco, comida tradicional, picadas de campo, y heladería!
El Mitre, bar histórico, ambientación acorde, cafetería y también comidas. Por las noches, música para escuchar con tranquilidad; en Bartolomé Mitre y Alsina.
Raíces de Cacao, cafetería y pastelería artesanal, de la mejor calidad, ambiente moderno, en Bartolomé Mitre 356.
Y la frutilla del postre, conocer el ¡mejor alfajor del mundo!
Se trata de “La Olla de Cobre” en Matheu 423, artesanía en chocolates y alfajores, desde 1978; en este año 2025 la prestigiosa guía culinaria internacional Taste Atlas, nominó a su alfajor “Chocolate 70% cacao” como el mejor del mundo; allí nos atendieron Priscila y Gaby, quienes orgullosas y solicitas, nos hicieron probar estas dulzuras.
¡Y por supuesto, nos llevamos una buena provisión de alfajores!
Realmente, nuestra visita a San Antonio de Areco superó las expectativas previas, tanto es así, que ya estamos pensando en volver, y seguir maravillándonos con el verde de una ciudad tranquila y cordial, donde se respira tradición y argentinidad, y la hospitalidad, es decir, hotelería, gastronomía y servicios locales, que están a un nivel de exigencia acorde con el turismo extranjero.
No lo dudes: ¡si tenés ganas de una excursión, o pasar un par de días distintos, andate para San Antonio de Areco!